Cinerótica

Mientras deambulaba entre mis viejos discos duros, me encontré con “Paprika” de Tinto Brass, una película bastante vieja de este director italiano que ha aportado bastante al erotismo..

Empecemos por las mujeres de Brass, ha buscado actrices de todos los tipos, rubias, morenas, pelirrojas, casi todas con unas nalgas hermosas. En sus filmes más viejos se pueden apreciar púbis bastante belludos, (como era la costumbre en ese entonces) y al final púbis rasurados (como ahora se estila).

La vestimenta de sus mujeres es increíble, puesto que todas usan ropa transparente, medias, ligueros y siempre elegantes y fashionistas. De verdad el vestuario merece un punto aparte, ya que salen a la calle vestidas pero desnudas, mostrándose completamente al mundo en un alarde de seguridad y coquetería,  con una vaporosa blusa de gasa blanca que deja ver en todo su esplendor los senos de la portadora, además de caminar con un andar rítmico que hace que los senos boten de manera fenomenal y haga las delicias de todos los que están en la calle.

No conformes con esto, usan la mayor parte del tiempo liguero y medias, que enseñan ante la menor provocación, mmmmhhh… que delicia, ver esos vestidos y faldas bastante ligeros que se mueven al vaivén de los muslos bien torneados de las mujeres de Brass o las pronunciadas aberturas laterales de los vestidos que dejan entrever a cada paso, el delta de quien los porta.

Un punto muy importante es que todas las actrices tienn sens naturales, así que apreciamos todo tipo: chicos, grandes, pesados, parados, en forma de pera, con pezones chiquitos, con pezones enormes,  separados etc.. Algo que creo es excelente ya que no cae en el prototípo de senos de melón, perfectamente esféricos cual balón de fútbol, no Tinto Brass nos muestra la diversidad y variedad que la naturaleza tiene.  Este tema por sí solo bien valdría un blog completo, ya que rompe el prototipo de la estética del cine, recordándonos que no hay un cánon de belleza y que en la variedad está el gusto.

La actitud es algo muy importante, casi todas son mujeres joviales, enamoradas de la vida, seguras, coquetísimas, un poco inocentes pero sobre todo deseosas, muchas de ellas están viviendo una vida casi perfecta, pero falta de pasión..

La eterna lucha entre el deseo y el amor es un tema siempre presente en su filmografía, mujeres casadas con un hombre amoroso, pero poco pasional siempre son tentadas por un bohemio/artista que descubre y explota esos deseos reprimidos para nuestro deleite visual.

Casi siempre el marido despierta de su letargo pasional debido a los celos. Al final de la película se  logra el equilibrio perfecto entre el amor y el deseo, lo correcto y lo prohibído, el perdón y la culpa.

Los espejos son importantísimos para Brass, la realidad se expande y podemos disfrutar un mismo momento desde muchos ángulos gracias a su preciso acomodo. Podemos acariciar la imagen multiplicada de la belleza femenina, verle las nalgas y los senos al mismo tiempo, tocarla por delante y por detrás, convirtiéndose una mujer en 2 o hasta 3 en un instante, el paraíso para cualquier voyerista.

Y qué decir de ese fetiche de Brass y el culo, nos lo muestra como el verdadero fruto prohibido, más que manzana es una sandía, jugosa y carnosa que se ha de abrir con violencia para después comer de forma lépera, con pasión desmedida, mientras la enculada disfruta un placer desconocido, poderoso y liberador.

Hay mucho más que decir sobre Tinto Brass, pero mejor aún es verlo, aquí unas cuantas recomendaciones para disfrutar de la particular visión erótica de este italiano.

• Nerosubianco (1969)
• Salon Kity (1975)
• Calígula (1979)
• La Chiave (1983)
• Paprika (1991)
• Cosi fan tutte (1992)
• Trasgredire (2000)
• Monamour(2005)

Para cerrar les dejo quizá su frase más conocida:

“L’erotismo sta alla pornografia come la fellatio sta al pompino! E’ una questione semantica”

-El erotismo es a la pornografía como el fellatio a la mamada, Es una cuestión de semántica-