El Arcadia

Gracias a los comentarios de Lau (¡¡Acá el chisme!!), recordé mi primer visita a un cine porno,  y creo que es una excelente anécdota para postear.

Mi edición de “Violación en Polanco” era la más chichinfla, de papel revolución y con una pésima ilustración. Recuerdo haberla comprado en el rebusque de Gandhi y pagué 35 pesos. La verdad es que ni el precio, ni la edición le hacían justicia al contenido, la empecé a leer justo después de salir del rebusque, no pude soltar el libro hasta terminarlo.

La parte del “Cine de piojito” se me hizo verdaderamente interesante así que me propuse visitar uno de estos cines para adultos, tarea no tan sencilla tomando en cuenta que yo tenía 16 o 17 años y con una cara de escuincle que no me ayudaba para nada.

Así pues me dejé crecer un poco la barba y bigote..  semana y media después y maldiciendo mi lampiña piel, me armé de valor y tomé el metro rumbo al Arcadia. Una vez allí con paso firme y decidido me enfilé a la taquilla, iba a entrar, lo tenía que hacer, no hay vuelta de hoja.. porqué chingaos no me van a vender un boleto, a huevo, a huevo.. ¡¡ooh mira, unas maquinitas!!! Continuar leyendo “El Arcadia”

El sol de Cancún

Estoy en una palapa, para ser preciso la palapa donde trabajo, desde ella puedo ver la playa, y las 2 piscinas del hotel, vacias en este momento.

La lluvia ahuyentó a todos los turistas mandándolos a sus habitaciones (no se les fuera a mojar el traje de baño). Algo delicioso de las pequeñas lluvias en Cancún es que el agua es tibia, así que hasta rico es que llueva. Llevamos 2 días con estos chaparrones que duran 30 minutos tras los cuales sale el sol a pleno y vuelve a elevar la temperatura, 3 o 4 horas después vuelve a llover y así..

Han sido días malos para la venta, así que estoy un poco aburrido en mi “oficina” con vista al mar. Ya casi no llueve pero la gente está asomada desde las ventanas de su habitación anhelando que se quite por completo para volver a salir a la playa (¡¡¡maricotas!!!).

Por el camino de adoquín veo acercarse 5 figuras femeninas que vienen paseando muy quitadas de la pena aún y con la ligera lluvia. todas vienen en bikini y pareo, dos de ellas traen playera. Cuento 2 cabelleras negras, una rubia, una pelirroja y una castaña, alcanzo a ver curvas muy pronunciadas en 3 de ellas, una menos exhuberante, pero también de figura femenina, otra muy esbelta, una figura más bien elegante. Continuar leyendo “El sol de Cancún”

Dulce veneno

Con ver tus ojos supe que eras peligrosa, un par de miradas bastaron para confirmarlo.

La inocencia brilla de primera instancia en tus pupilas, pero inmediatamente después salta a la vista el profundo deseo que tu cuerpo encierra, la sonrisa perversa y seductora disipa cualquier duda que pudiera quedar.

Al acercarme noto el fuerte olor a sexo que emana de tí, el tacto de tu piel es tierno, sin embargo esta sensación es reemplazada inmediatamente por una descarga eléctrica que nos recorre a ambos al tocarnos. Tus ojos se clavan en los míos buscando una rápida respuesta a esta repentina chispa que ha aparecido entre nosotros.

Desnudarnos y acariciarnos parece ser la única respuesta aceptable, comenzamos el conocido ritual de reconocernos, con larguísimos besos pendulares que oscilan de lo sutil a lo salvaje, nuestras manos hambrientas recorren erráticamente el cuerpo del otro, en ocasiones con ternura, en otras con pasión desbordante. Continuar leyendo “Dulce veneno”

Imaginando un orgasmo

Del otro lado del teléfono escucho tu voz aterciopelada, una breve conversación nos pone al tanto de nuestras vidas. Al cabo de 10 minutos surge la verdadera razón de tu llamada, estás excitada, sola y recostada en tu cama.

Mientras platicábamos habías comenzado a tocarte, primero como no queriendo la cosa, sin embargo ya escucho tu respiración un poco agitada.

-Me encontré tu blog- dices con voz pausada -Me gustó, me masturbé un par de ocasiones, pero prefiero escucharte-

Tu voz es acompañada por el zumbido de alguno de tus juguetes que recién encendiste.

-Cuéntame algo rico, ¿qué has hecho, te has ido de pirujo, has tenido mucho sexo?- Continuar leyendo “Imaginando un orgasmo”

Una buena lectura

Además de las tantas cualidades que Ana poseé, tenía la enorme ventaja de que su padre era dueño de una librería, así que teníamos acceso a cuanto libro quisiéramos leer. Quizá en un primer vistazo no parece tan genial, pero tener una libreria como biblioteca personal es muy cómodo.

Ana tiene el arte en las venas, su padre bibliófilo, su mamá pintora, ella actríz de teatro, escritora, guionista y ávida.. avidísima lectora.

Como buena artista la pasión es su principal motivación, lo que yo disfrutába enormemente, pues eran largas horas que dedicábamos a dar rienda suelta a nuestra sexualidad.

Imagino que su gusto por la actuación le brindaba esa facilidad y goce por exhibirse, así que pronto nos encontramos teniendo sexo en lugares donde fácilmente nos podían ver. Uno de esos lugares era una hamaca que instalamos en una azotea  flanqueada por 2 pequeños edificios cuyas ventanas nos ofrecían una buena cantidad de público. Continuar leyendo “Una buena lectura”

Bingo!

Hace ya algún tiempo,  un amigo me comentó que los Bingos eran buen lugar para conocer mujeres interesantes.

No soy fan del bingo, así que jamás le dí mayor importancia al comentario, hasta hace poco, que por diversas razones me encontré con 6 horas de absolutamente nada que hacer mas que esperar, así que me dirigí a una plaza cercana para dispendiar ese tiempo.

Dí un par de vueltas a la plaza, había restaurantes, cines, un par de cafécillos, por supuesto muchas tiendas, pero nada realmente de mi interés. Había bastante gente, así que decidí comprarme un café y sentarme a babosear.

Ya con mi café en la mano e instalado en una banca a la mitad de la plaza comencé a disfrutar de ese extraño placer que es observar a la gente.

Pasó un grupo de mujeres, todas usando el uniforme de la empresa donde laboraban, una blusa blanca con azul y un pantalón oxford, todas iguales pero distintas: la que traía la blusa abotonada hasta arriba, la que le ajustaba el pantalón por delante, a la que le ajustaba por detrás, la de los zapatos cómodos, la de tacones altísimos, la de los accesorios recargados, la de la mascada, la del pelo suelto, la de los senos grandes, la de las nalgas paraditas, observar es realmente todo un placer. Continuar leyendo “Bingo!”

La buena esposa

Sin temor a equivocarme, puedo decir que Helena es una mujer notable:

Lleva una excelente relación con su esposo, atiende a sus hijos amorosamente, mantiene su hogar perfectamente, prepara la comida de su familia con esmero y excelente gusto culinario, es presidenta de la asociación de padres de la escuela de sus hijos, su casa está decorada con suma elegancia, habla 3 idiomas y tiene un título universitario.

Al nacer su primer hijo, tomó la decisión de renunciar a su carrera profesional y dedicarse a ser la estupenda mamá, esposa y ama de casa que es.

Alguna vez le he dicho a Helena que es como si fuera la guionista de esos programas del hogar, desde las manualidades, hasta las galletitas horneadas, su hogar es simplemente impecable.

Es por esto que Alan está mas que contento con cumplirle su único capricho “fuera de lo común” a Helena y cómo no, después de trabajar con tanto empeño en su hogar creo que se lo merece. Continuar leyendo “La buena esposa”

Literótica | Mogador

Estoy convencido que los libros tienen la habilidad de escoger por quién han de ser leídos..

Mientras esperaba para abordar mi vuelo, entré a la librería del aeropuerto meramente a babosear, en mente tenía una revista o algo muy ligero pues mi vuelo no era tan extenso.

Dí un par de vueltas revisando los estantes, no había una gran selección de libros pues era una librería muy pequeña, más bien un puesto de revistas con un par de estantes con libros, desde mi primer búsqueda hubo un libro azul cuyo título llamó mi atención:  “En los labios del agua” de Alberto Ruy Sánchez

En la segunda ojeada ese mismo libro llamó mi atención nuevamente, así que lo tomé y me percaté en principio que era un libro corto, perfecto para el viaje en puerta. Leí la sinopsis y se me hizo muy interesante pues hablaba de un hombre que pertenecía a “La casta delirante de Los Sonámbulos”, una idea con la que me siento plenamente identificado. Lo abrí para leer un pequeño fragmento: Continuar leyendo “Literótica | Mogador”

El vaivén de tus caderas

El vaivén de tus caderas al caminar, provocaba que tu vestido danzara alrededor de tus muslos, los altísimos zapatos de plataforma le daban una personalidad putanezca a tus piernas, largas y morenas.

El escote no era tan pronunciado pero permitía admirar suficiente de tus senos como para desear estar entre ellos.

Tus ojos llenos de atrevimiento confirmaban el mensaje que todo tu cuerpo enviaba, “soy una hembra con ganas”

Sentada en la terraza con las piernas semi-abiertas, eras una invitación al placer, tus labios besaban la taza cada vez que sorbías café de ella. Pasaron unos minutos y nadie se acercaba, no esperabas a nadie y tu café ya estaba en su segunda mitad. Tu oferta estaba a punto de expirar, tu gesto había cambiado un poco..
ahora había una pequeña duda en el, ¿acaso nadie te había visto entrar, acaso nadie había notado el vaivén de tus caderas? Continuar leyendo “El vaivén de tus caderas”